Mi gran espera
Mi embarazo ha sido un proceso maravilloso es realmente asombroso el milagro de dar vida y de cómo puedes sentir un amor infinito y único por alguien que no ves pero lo sientes desde tus entrañas, dentro de este proceso no todo es romántico, el embarazo es duro y en ratos pesado, cambia la vida de un día a otro , no solo te cambia el cuerpo si no también el ánimo y las prioridades, dejas de pensar en ti para dar paso a un universo enterito que está revoloteando en tu panza, mis primeros tres meses fueron muy intensos ; tenía malestar casi todo el día náuseas y vomito me sentía súper hinchada y mis hormonas estaban alteradas al mil, en el fondo me sentía culpable por no estar “disfrutando” mi embarazo como debía ser; aunque ahorita que lo recuerdo claro que lo hacía lanzando miles de sueños al aire e imaginado esa vida que estaba formando dentro de mi, pero literal llego mi segundo trimestre y es como si me hubieran dado un shot de vida , energía al 1000, con ganas de muchos planes, súper activa y con una felicidad enorme por la bendición de estar gestando además que en este tiempo empecé a sentir los primeros movimientos de mi bebé y es una de las sensaciones más hermosas, ahorita que estoy en el último trimestre la recta final sigo con mil de ganas de hacer cosas , desde hace días traigo el síndrome del nido a todo lo que da , tratando de tener todo lo necesario para la llegada de Miguel Ángel pero la verdad es que la vida ya no me da para tanto , ya no puedo ser todo terreno como antes, me he vuelto una tortuga para caminar , me pesa la pancita y la espalda lo reciente , en las noches me levanto dando saltos de los calambres que me dan en las piernas , pero todo esto no hace que mi actitud de emoción cambie, esto es lo que yo he vivido ; cada quien tiene una historia diferente y cada embarazo es un caso esto es un poquito de lo que me ha tocado a mi , ya estoy a nada de conocer a mi bebito ✨🥰🙏
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